El efecto de la fama en Talisman
El jueves asistí con gran ilusión al concierto de Heyser, como teloneros, y Talisman. Bilborock estaba en pleno apogeo con la sala llena de fanáticos del Heavy esperando impacientes el gran momento.
Heyser dio la talla para ser un grupo primerizo. Nos sorprendió con un Hard Rock en castellano, muy dinámico y melódico y con un cantante que en pocos minutos se ganó el favor del público.Muy sorprendidos nos dejó el gran chorro de voz de su vocalista Alain, un diamante en bruto por pulir, que se atrevió con lo que no es capaz de hacer actualmente ni el propio Ian Gillan, el Child in Time de Deep Purple. Terminaron nada más y nada menos que con el Rock America de Danger Danger que quedó un poco deslucida porque la guitarra dejó de sonar por porblemas técnicos. Tras unos minutos, problemas con las luces del escenario incluidos y solucionados con prontitud, por fin las estrellas de la noche bajaron del firmamento rockero a las tablas de Bilborock.
Con Talisman, creo que más de uno se llevó una decepción. El talento de los componentes del grupo fue, como se esperaba, inigulable, pero no fue así su comportamiento, en especial el de Jeff Scott Soto. ¿Será la fama la que ha convertido a un chico que vendía pases de camerino con su novia en los conciertos de Ingwie Malmstein en un cantante más que arrogante? El hecho que nos dejó perplejos a todos los asistentes fue un altercado entre el técnico y el cantante JFF. Este último en uno de sus movimientos, giros y saltos derribó de un golpe el trípode del micrófono. El técnico fue a recogerlo pero el cable del micrófono se había enredado en el trípode y al cogerlo JFF notó que le tiraban del micro que sostenía entre las manos y lo tiró al suelo de manera soberbia muy cerca del técnico.
En mi opinión, uno puede tener mal carácter pero siempre debe guardar una imagen ante el público que ha pagado por verle.
PERO AÚN HAY MÁS
Según fuentes fidedignas las rencillas entre el grupo Talisman y los técnicos de Bilborock vienen desde antes del concierto, concretamente desde el momento en que se realizaron las pruebas de sonido. Problemas de puntualidad por parte de los técnicos, arrogancia y terquedad de los Talisman... Un cúmulo de aspectos que desembocaron en una mala imagen del grupo para el público.
Una lástima.
